El poema Septiembre (2004), de la poeta y traductora mexicana de origen ucraniano Gloria Gervitz, es la séptima parte del poema de largo aliento Migraciones, publicado por secciones desde 1979.
dijo el rabino Zusya poco antes de morir:
“cuando esté ante las puertas del cielo, no me vayan a preguntar,
¿por qué no fuiste Moisés? sino ¿por qué no fuiste Zusya?
¿por qué no llegaste a ser lo que sólo tú podías llegar a ser?”
dice:
toca
¿sientes?
¿sientes
cómo te desborda?
ese fluir
ese gozo
míralo
no se dice
es tú misma
tú
en ti
hablo de los pulsos
no es la luz
es tú
tú en luz
el corazón en luz
luz disuelta en clorofila
¿la oyes?
fluye
se inclina
dócil
húmeda
dice:
¿escuchas?
es tu respiración
estás viva
y estás aquí
y lo que hubiese querido ser
y más
y más
no es que pueda explicar
pero
esto soy yo
éstos los días
la vida
y
¿en qué parte
de mí
estoy?
¿adónde?
y esta alegría casi
azul
como un lote baldío
parece un águila
un quetzal
hey no te vayas
dice una voz
dentro
de mí
quédate
estoy
me dejo estar
oigo mi respiración
que es también la tuya
no sé a quién le hablo
el viaje
en lo más solo
necesita ser
compartido
y la luna
donde se ahogó Li Po
baja
hasta el estanque
y yo
que siempre soy otra
y la misma
aquí
en este año de mi edad
aquí
en el calor
del final del verano
en esto que siento
alta
indómita
como una sequoia
como una yegua joven
súbita
impredecible
y en su vuelo
la palabra
allí
donde la luz
se dobla
el sol
entre los narcisos
deslumbrado
¿qué hago
con tanta
belleza?
¿y si me quedara
sin palabras?
atrévete
dame
come
de mi mano
desbórdame
palabra
de toda
misericordia
¿vas a dejarme?
y si digo
es el alma
¿digo algo?
adónde es
que he estado
que estoy
adónde se me fue la vida
la vivida
adónde
la por vivir
y si hubiera sido otra
sería la misma otra
no tengo más vida
que ésta
que me vive
y yo con ella
en ella
en esto que soy
y en esto otro
que también
soy
y que no sé qué es
mía de mí
mi vida
toda
¿y si supiera
qué sabría?
amasijo de luz
desembocadura
la claridad
como si se le acabara
el corazón
se está así en Dios
-en lo que llamamos
Dios-
y yo ahí
como quien mira
como quien oye
yo la intrusa
la de ti presentida
espera
y tiembla
el humano temblor
de ante ti
y falta el aire
ah esperada
en tu gozo
reclamo
lo que colmado
colma
¿quién es ésa
que me hace ser
la que
soy
y para qué
y por qué
es que soy?
siente
sí puedes
siente
¿sientes?
inunda
penetra
duélese
allí
en su belleza
duélese
en ti
dice:
tómame
ábreme
ábrete en mí
y la alegría
doblega
profundo
duele
duele su belleza tosca
su silencio
duele
y el cielo de septiembre
baja
hasta mí
cálido
y cubierto de niebla
y yo
que un día
moriré
estoy aquí
en este instante
que es todos los instantes
estoy viva
Fotografía de Daniel Santiago Salguero