Pierina Pighi Bel
Tecelar [Weavings or Textiles] · Lygia Pape · 1959
Woodcut · 19 1/2 x 19 1/2″ (49.5 x 49.5 cm)
The Museum of Modern Art
Promised gift of Patricia Phelps de Cisneros through the Latin American and Caribbean Fund in honor of Connie Butler
© Projeto Lygia Pape
Laura Turégano, directora asociada del King Juan Carlos I of Spain Center (KJCC), habló con Temporales sobre su trabajo en este Centro y sobre los logros y los retos de la institución en sus 25 años de historia. En el mes de aniversario, Turégano asegura que “El KJCC está avanzando con paso firme”.
PIERINA PIGHI BEL: ¿Cuáles crees que son los mayores logros del KJCC en estos 25 años?
LAURA TURÉGANO: Con dos cátedras, la Cátedra Rey Juan Carlos I de España en Cultura y Civilización Española y la Cátedra Andrés Bello en Culturas y Civilizaciones Latinoamericanas, el Centro ha acogido a los más eminentes profesores especialistas en la España contemporánea y el mundo hispanohablante. Además, las actividades regulares del Centro han logrado conectar tanto con la comunidad de NYU como con la ciudad de Nueva York. No es fácil conseguir ambos logros.
¿Cómo ha ido cambiando o creciendo la programación todos estos años?
Nuestra programación se ha ido haciendo cada año académico más variada y diversa, tomando riesgos con planteamientos provocadores y muy innovadores. No huimos de temáticas y/o personas controvertidas. Al fin y al cabo somos una Universidad que debe generar debate y cuestionar nuestra manera de pensar.
¿De qué eventos o exposiciones te sientes particularmente orgullosa?
No podría escoger ningún evento o exposición en particular. Sería como decir a qué hijo/a quieres más, ¿verdad? Hemos tenido tantas y en disciplinas tan diversas (cine, teatro, poesía, literatura, arquitectura, fotografía, arte, política, historia, derechos humanos, etc.) que destacar alguno frente a los otros en particular sería muy injusto. Por supuesto, la serie a la que rendimos homenaje con este número especial de Temporales, Geometría verbal, me caló fuertemente, por la envergadura del proyecto, por la talla de los poetas y los artistas representados, y por su belleza: desarrollar una representación verbal partiendo de una representación visual. El resultado fue una simbiosis creativa portentosa.
¿Cómo fue el reto de trasladar todos los eventos a la virtualidad de un momento a otro durante la pandemia? ¿Ese ha sido el mayor reto del KJCC o cuál crees que ha sido el mayor reto?
Fue un reto enorme ya que nuestros eventos se caracterizan por esa parte no tangible que es el contacto con las personas, las conversaciones que se generan dentro y fuera de nuestro auditorio. Fue muy duro, pero conseguimos ofrecer un producto de mucha calidad para que el disfrute fuera de alguna manera distinto al de un webinar de Zoom. Creamos cuasi programas de televisión.
Este ha sido uno de los grandes retos, pero hemos tenido otros como dificultades económicas, problemas estructurales. Siempre hemos conseguido salir adelante sin que se percibiesen.
¿Hay alguna comunidad a la que todavía sienten que les falta alcanzar? ¿A qué otras comunidades quisieran llegar?
Durante estos 25 años hemos hecho grandes esfuerzos para llegar a todas las comunidades posibles. Esto es parte de nuestra idiosincrasia, la pluralidad y la diversidad. Irónicamente, nos gustaría poder ver a muchísimos más estudiantes de pregrado en nuestros eventos. Es difícil llamar su atención en una Universidad como NYU que ofrece tanta variedad de programas y en una ciudad como Nueva York.
¿Qué le dirías a la gente que pide el cambio de nombre del Centro?
Que lo que nos caracteriza no es cómo nos llamamos sino lo que hacemos.
¿Qué objetivos tiene el KJCC para los próximos años?
Continuar y expandir nuestra misión de manera exponencial. Hemos llegado a una masa crítica muy saludable que nos va a permitir reforzar nuestra presencia, generar muchos más proyectos y forjar alianzas y colaboraciones. El KJCC está avanzando con paso firme.
Al ser una de las personas que más tiempo lleva en el KJCC, ¿qué dirías que le has aportado y qué te ha aportado el KJCC a ti?
Creo que mi energía y empuje unido a mucho esfuerzo. Unido todo ello a un gran alineamiento con la misión del Centro. A mí me ha dado la oportunidad de conocer a una cantidad enorme de personas, tanto participantes en nuestra programación como asistentes. Cada persona me ha aportado algo.
Translated by PIERINA PIGHI BEL
Laura Turégano, associate director of King Juan Carlos I of Spain Center (KJCC), spoke with Temporales about her work in this Center and the achievements and challenges of the institution in its 25-year history. During the anniversary month, Turégano assures that “the KJCC is moving forward steadily.”
PIERINA PIGHI BEL: What do you think are the most outstanding achievements of the KJCC over the past 25 years?
LAURA TURÉGANO: With two chairs, the King Juan Carlos I of Spain Chair in Spanish Culture and Civilization and the Andrés Bello Chair in Latin American Cultures and Civilizations, the Center has welcomed some of the most eminent specialists in contemporary Spain and the Spanish-speaking world. In addition, the Center’s regular activities have been very successful in connecting with communities in both NYU and New York City. It is not easy to achieve both.
How has the KJCC’s programming evolved and grown over all these years?
Each academic year, our programming has become more varied and diverse, taking risks with provocative and highly innovative approaches. We do not run away from controversial topics and/or people. After all, we are a University that must generate debate and question our ways of thinking.
What events or exhibitions are you particularly proud of?
I could not choose any event or exhibition in particular. It would be like asking a mother which child you love the most, right? We have had so many events and exhibitions and in such different disciplines (cinema, theater, poetry, literature, architecture, photography, art, politics, history, human rights, etc., etc.) that highlighting one over the others, in particular, would be unfair.
It goes without saying that the series we are honoring in this special issue of Temporales, Verbal Geometry, left a special mark on me. Its scope, the stature of the selected poets and artists, and its sheer beauty: to develop a verbal representation from a visual one. The result was an astonishing creative communion.
How challenging was it to move all of KJCC’s events online during the pandemic? Was that the biggest challenge for the KJCC, or was there another greater challenge?
It was a huge challenge since there is a non-tangible part that characterizes our events: the contact with people, the conversations generated inside and outside our auditorium. It was very hard, but we managed to offer a high-quality product so that the enjoyment was somehow different from that of a Zoom webinar. We created quasi television programs.
This has been one of the significant challenges, but we have had others, such as economic difficulties and structural problems. We have always managed to get ahead without them being perceived by our patrons.
Is there a community you still feel you have to reach? What other communities would you like to reach?
During these 25 years, we have made great efforts to reach all possible communities. This is part of our idiosyncrasy, plurality, and diversity. Ironically, we wish we could see more undergraduate students at our events. It isn’t easy to attract their attention in a University like NYU that offers such a variety of programs and in a city like New York.
What would you say to the people who ask for the Center’s name to be changed?
That what characterizes us is not our name but what we do.
What goals does the KJCC have for the coming years?
To continue and expand our mission exponentially. We have reached a very healthy critical mass that will allow us to strengthen our presence, generate many more projects and forge alliances and collaborations. The KJCC is moving steadily forward.
As one of the longest-serving people at the KJCC, what would you say you have brought to it and what has the KJCC brought to you?
I think my energy and drive, coupled with a lot of effort. This is linked to a great alignment with the Center’s mission. It has given me the opportunity to meet many people, both participants in our programming and attendees. Each person has given me something.
Laura Turégano, de Madrid, ha sido Directora Asociada del KJCC desde 2004, y ha sido Directora Interina en otoño de 2007, otoño de 2011 y en los años académicos 2018 y 2020. Obtuvo una Maestría en Administración y Gestión Cultural de la Universidad de Nueva York (NYU) y una Maestría en Estudios Europeos del Colegio de Europa en Brujas, Bélgica. Recibió prestigiosas becas de la Caixa Bank y del Premio Jabuti) and Bugra (2021). His work has been published in several magazines and translated into English, French, Spanish and German. She has a Doctorate in Communication and Semiotics at PUC/São Paulo and a Master’s Degree in Literary Studies at the Federal University of Paraná.
Laura Turégano, from Madrid, has been the KJCC Associate Director since 2004, and served as Acting Director in Fall 2007, Fall 2011 and in the academic years 2018 and 2020. She received a Master in Arts Administration from New York University (NYU) and a Masters in European Studies from the College of Europe in Bruges, Belgium. She received prestigious fellowships from la Caixa Bank and from the Ministerio de Asuntos Exteriores de España para realizar sus estudios de posgrado. Turégano tiene más de treinta años de experiencia en filantropía, diplomacia cultural y asuntos públicos, con experiencia en las artes, el cine, la cultura y las relaciones internacionales.
Foto por/by Sebastián González