Foto: Daniela Duque Rincón
cuesta apalabrarlas
pero aquí están
las acuerpo
madre
maestra, disertante y cuidadora
abuela
maestra, pianista, poeta y cuidadora
abuela
maestra y cuidadora
abuela
enfermera y cuidadora
tía
maestra y cuidadora
me pregunto
cuándo y cómo
todas estas mujeres que cuidaron
me enseñaron a cuidarme
¿qué gestos me negaron
para cuidarse?
¿qué gestos para sí
me regalaron?
***
descubrir el propio acento
escuchar
la ye
y el che
por primera vez
un extrañamiento
de la propia voz
un escozor esta invitación
a neutralizarla
acentuar el propio acento
montar en él una patria
cien veces
caída
siseo encendido del sur
el retumbar de una marcha
intravenosa
verde selva
marrón tierra
techo, chapa, tacho
yanta, yuvia
yanto
lejano
el canto
de aves que vuelan
bajo
the classroom
as a
bridge
cruce
caja
pantano
lupa
megáfono
hipérbole
teatro ciego
constelación
***
medir la lengua
ordenarla en una serie
de operaciones gramaticales
descubrir la debilidad
de ese pacto que se tensa
cuando se hacen conscientes
sus leyes
sobre qué sumas y qué restas
se ha montado esta manera
de mirar
cuántas manos
dieron forma a esta palabra
cuántos cuerpos contuvieron el auyido
cuántas muertes
mastica
mi silencio
***
me trenzo mientras viajo
cierro los ojos al hacerlo
puedo coserme el pelo
sin mirarlo
es un movimiento
que las manos guardan
respiro
mi cabeyo se engrosa
y luego se repliega
dentro de mis dedos
adivino
esa coreografía
veo con el estómago
veo con los poros
orbes se arremolinan
en el tubo que nos contiene
veo con el cuerpo
sin ver el cuerpo
una forma de piel expandida
una función para estos hilos que se estiran
como nervios desde mi cerebro
como si fueran conexiones neuronales desplegadas
ayí también el movimiento de mis manos
ayí esta memoria que me antecede
cuando traqueteo rumbo a la catorce
Union Square
la parada de mi clase
la lengua gotea
de abajo
hacia
arriba
Regina Grisolia es una escritora y docente argentina. Sus superpoderes son dormir mucho y perder cosas sin alterarse. También reconoce en ella el talento de hablar mal todos los idiomas que aprende. Eso sí, se excusa en el acento y secretamente lo celebra (si no, miren este proyecto).